Basurales a cielo abierto, una de las herencias de Bruera

Olores nauseabundos, residuos de todo tipo, quemas en cualquier momento y roedores, son el combo mágico con el que conviven los vecinos de Hernández, barrio en el que se encuentra el basural más grande la región.

La problemática de los basurales a cielo abierto es una de las constantes en el Partido de La Plata, principalmente en los barrios periféricos. Hernández es el caso más resonante y por el que los vecinos del lugar tomaron la iniciativa y salieron a marchar y a reclamar por su urgente suspensión.

Sin embargo, Hernández no es la excepción. El arroje de basura y otros desechos en campos abiertos también es una habitual en Villa Elvira o al costado de la Ruta 11 camino hacia la vecina ciudad de Magdalena, para citar unos ejemplos.

Quizás, en menor medida, y a falta de una política de saneamiento y limpieza, estos basurales a las salidas de la ciudad, son mínimos en comparación a lo que sucede hoy en José Hernández, donde el depósito de basura ilegal ya lleva un tiempo, y alcanza unas 15 hectáreas de suelo, ubicadas entre las calles 25 a 31, de 514 a 520.

Los vecinos de la zona se organizaron en la autodenominada “Asamblea No + Basura en J. Hernández". En este marco, efectuaron denuncias: de la promoción por parte delMunicipio de este depósito clandestino. En dicho lugar se producen quemas de residuos en diferentes horarios, se ha observado el incremento de la presencia de roedores, y por otro lado, se efectúa el arroje de basura no sólo del tipo domiciliaria, sino desde residuos patogénicos hasta autopartes.

Desde la gestión Bruera se prometió llevar a cabo el ansiado saneamiento de la zona, además del cierre definitivo del mismo. Incluso, en algún momento se anunció la firma de un convenio con la Universidad Nacional de La Plata para alcanzar una solución definitiva.

Hasta el momento nada de ello ocurrió. La desidia, la suciedad y las ratas, gobiernan enHernández. El abandono es el reflejo de esta localidad platense, que ha crecido demográficamente en los últimos años a ritmo acelerado.

Hoy, con las elecciones a cuestas que dieron un veredicto inapelable, será turno de la nueva gestión hacerse eco del viejo reclamo de los vecinos, y realmente darle una solución definitiva: el cierre de la cantera. Habrá que esperar a después del 10 de diciembre, y ver si éste será un tema de agenda para las flamantes autoridades municipales.