El ex funcionario kirchnerista José López declaró ante el juez Daniel Rafecas en la causa que investiga el origen de los 9 millones de dólares que intentó ocultar en un convento de General Rodríguez. En este marco, el ex secretario de Obras Públicas aseguró que el dinero no es suyo y que pertenece a la "política" y personas que no puede nombrar.
"El traslado al convento fue forzado. El evidente interés para que me involucrara era porque ellos se sentían perseguidos, observados y me expusieron a mí para no quedar expuestos ellos", afirmó en los tribunales de Comodoro Py.
Luego, agregó: "Me arrepiento de no haber tenido la claridad ni la fortaleza suficiente para haber resistido las presiones e intimidaciones que padecí".
El ex funcionario se negó a revelar los nombres de los supuestos dueños del dinero y explicó: "Me usaron como chivo expiatorio, como una maniobra distractiva para poner la atención pública en otro lugar. No tuve otra alternativa que obedecer”.