Legisladores provinciales del Frente Renovador cuestionaron el revalúo inmobiliario bonaerense impulsado por el gobierno de María Eugenia Vidal, al considerarlo un "impuestazo" que "va a impactar en el bolsillo de los trabajadores", y sugirieron que los impuestos en el rubro vayan "atados al porcentaje de las paritarias en la provincia".

La diputada provincial Valeria Arata fue quien sugirió que "la suba de los impuestos inmobiliarios urbanos o rurales deberían ir atadas al porcentaje de las paritarias en la provincia".

"Si quieren ponerle un tope a las paritarias y los salarios de los trabajadores, pongan la misma cifra para que no afecte al que menos tiene. Si suben un 58% ciento el inmobiliario que suban de ese modo los salarios”, afirmó.

En tanto, su compañero de banca Pablo Garate indicó que "en la provincia de Buenos Aires habrá jubilados, trabajadores y sectores de clase media que van a tener un nuevo impuesto sobre ellos que es el impuesto de bienes personales que antes del revalúo no lo pagaban por no estar alcanzados ni contemplados".

"Nosotros le pedimos a la gobernadora que pare este impuestazo, que frene este revalúo, y que discutamos una salida gradual, y atada a la inflación. Los trabajadores, los jubilados y la clase media, ahora dudan qué pagar y qué no pagar, porque el bolsillo tiene un límite”, agregó.

Desde el Frente Renovador indicaron que la actualización de la escala en el impuesto inmobiliario dispuesta por la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA), en promedio llega al 56%, más una suba del 50% promedio en el inmobiliario rural.