El fiscal platense Fernando Cartasegna, que se encuentra de licencia tras la violenta agresión sufrida en su despacho el mes pasado, fue internado en un instituto neuropsiquiátrico a raíz de un presunto cuadro de estrés depresivo.

Fuentes judiciales precisaron que le internación de Cartasegna fue "por decisión sus familiares", quienes notaron que el agente del Ministerio Público presentaba un "importante" desmejoramiento en su salud y estado de ánimo.

El fiscal estaba de licencia luego de sufrir una seguidilla de ataques, entre los que se incluyeron uno dentro de su despacho de la fiscalía platense y otro en su domicilio de la localidad de Gonnet, el que fue baleado.

El primero de los ataques contra Cartasegna se produjo a finales de abril, durante la madrugada, cuando dos hombres y una mujer vestidos de policía lo golpearon en la calle cuando bajaba de su auto para ir a la fiscalía de calle 7 entre 56 y 57.

Cuatro días después, el fiscal fue encontrado dentro de su oficina poco después de las 18, atado de pies y manos, con un cable en el cuello y a su lado escrita con azúcar la palabra "Nisman", en clara referencia al fiscal federal hallado muerto con un balazo en la cabeza en su casa de Puerto Madero.

El último de los ataques se concretó el 19 de mayo, cuando uno de sus custodios se tiroteó con dos personas que llevaban puestos chalecos antibala frente a la puerta de la casa del funcionario judicial, en la localidad de Gonnet.

La última noticia vinculada con la actuación del fiscal fue la desaparición de su oficina del expediente del caso Miguel Bru, situación que fue detectada durante un arqueo dispuesto por la Procuración bonaerense.

Previo a los ataques Cartasegna investigaba, entre otras, una causa que involucra a efectivos de la Policía Bonaerense y abogados de la ciudad capital, quienes integrarían una banda dedicada a la recaudación ilegal bajo la modalidad "caranchos".