Una joven de 28 murió ahogada al caer en una pileta durante una fiesta clandestina en una casaquinta ubicada en 520 e/ 159 y 160, Melchor Romero. La fiesta se organizó y difundió a través de las redes sociales, donde se la promocionaba bajo el lema "Vení y rompé todo". Desde el municipio se intentó de forma infructuosa suspendarla.

El 30 de diciembre se había notificado al propiertario de la quinta, Carlos Bellone, que se abstenga de realizar dicho evento, pues carecía de la correspondiente habilitación que exige la Municipalidad de La Plata.

Tras seguir siendo publicitada en facebook, el 31 de diciembre la Municipalidad redactó una nueva motificación prohibiendo la fiesta, y así todo los organizadores la llevaron adelante.

A las 4 am los inspectores municipales constataron que el evento se realizaba igual, por lo que procedieron a la clausura del lugar. Dos horas después regresaron y la fiesta continuaba, a pesar de la faja de clausura.

Durante este lapso temportal se produce el fallecimiento de la joven de 28 de años cuya identidad no trascendió.

Rumores indican que la joven era epiléptica, y murió ahogada mientras "bailaba en la pileta", según lo indicado por unos de los testigos del hecho.

El juez de garantías de La Plata César Melazo, a través de su cuenta oficial en twitter, efectuó duras críticas hacia la comuna platense por su rol en los controles de estas fiestas.

"A las 3.59 advertí que esta fiesta ilegal estaba funcionando, la municipalidad y la policía municipal se fueron a la una cuando no hay nada", tuiteó Melazo y agregó: "Esta muerte de esta joven debe provocar el escarmiento a los coimeros imbéciles que nada hicieron policía municipal y control urbano".