En el mediodía de ayer, el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, fue atacado por un grupo de colectiveros, luego de apersonarse en una protesta donde se pedía justicia por el asesinato de Daniel Barrientos, chofer de la línea 620, a quien dos delincuentes mataron en Virrey del Pino.
Por este motivo, Aníbal Fernández, ministro de Seguridad de la Nación, se solidarizó con su par bonaerense y repudió la violencia que recibió funcionario.
"De ninguna manera se puede tolerar una agresión de este estilo. Nadie puede negar que Sergio le pone el cuerpo y trabaja muchísimo. Ser agredido de semejante manera es un espanto. Hay que encontrar a los responsables y sancionarlos. Tenemos que parar un poco la mano porque, a pesar de las diferencias, todos nos rompemos el lomo para poder tener seguridad y vivir tranquilos", dijo Fernández.
Pero el cese el fuego entre ambos duró poco. Es que en una conferencia improvisada a la salida del Hospital Churruca, Berni volvió a pedir el envío de gendarmes a la Provincia, y Aníbal Fernández salió a desmentirlo.
"Su gente, a quien conozco, nunca nos pidió un efectivo. No hemos recibido nunca un pedido, no sé qué hicieron antes… Pero ni nos hemos sentado a hablar de este tema, nunca, no tengo necesidad de dar explicaciones”, indicó el funcionario del gabinete nacional.
Fernández remarcó que el envío de oficiales lo había acordado en una reunión con el jefe de Gabinete del gobernador Axel Kicillof, Martín Insaurralde, e intendentes locales, y que el primer envío lo hizo a fines de 2021.
"Nuestra tarea en estos días es la que acordamos con el jefe de Gabinete de la provincia. Nosotros no inventamos nada. Si el gobernador no sabe lo que hace el jefe de Gabinete y el ministro de seguridad no sabe lo que hace el jefe de Gabinete no es un tema mío".
