El presidente Mauricio Macri amaneció hoy "bien" de salud en la residencia de Olivos, luego de la "arritmia leve" que experimentó, y a las 11:30 será sometido a un "nuevo chequeo domiciliario", informó su vocero Iván Pavlosky, quien aseguró que el mandatario "está sujeto a presiones como todos".

"Macri es una persona que pone el cuerpo desde las 8 de la mañana al final del día y está encima de todos los problemas", remarcó el portavoz, quien afirmó que la arritmia que el Presidente sufrió ayer, desde anoche "ya estaba controlada".

En declaraciones a radio Mitre, Pavlosky señaló que el primer mandatario se encontraba esta mañana "bien", descansando en la quinta de Olivos donde pasó la noche, tras puntualizar que los médicos de la unidad presidencial le aseguraron que "desde el lunes puede llevar una vida completamente normal".

Los profesionales, añadió el funcionario, le indicaron que este fin de semana "haga reposo" en Olivos, es decir, que "haga una actividad tranquila y desde el lunes que vuelva a su agenda normal de trabajo".

Ante una pregunta sobre la intensidad de la agenda que lleva adelante Macri, el vocero enfatizó que el Presidente "está sujeto a presiones como todos" y se preocupó en destacar que "es el primer episodio" de estas características que experimentó el mandatario desde que asumió en la Casa Rosada.

"Desde el lunes arranca la actividad normal", insistió el portavoz presidencial, y recordó que "lo único que se canceló" es un acto que Macri tenía previsto encabezar hoy en el partido bonaerense de San Miguel, a fin de que pudiera continuar con el reposo indicado.