Tras 20 años de matrimonio, la gobernadora María Eugenia Vidal y el intendente de Morón, Ramiro Tagliaferro, decidieron tomar caminos separados. Las presiones, las amenazas y el espeso clima que se creó alrededor de la familia Tagliaferro-Vidal detonaron el vínculo entre ellos.

El matrimonio, que tiene tres hijos –Camila, María José y Pedro, de 15, 13 y 7 años respectivamente-, se dañó visiblemente en la última campaña electoral cuentan allegados a la pareja.

En las últimas semanas, la Gobernadora habría dado muestras del desgaste que implica el viaje a La Plata y el compromiso con sus hijos, pero no mencionó a Tagliaferro en una entrevista que publicó el diario Perfil.

Novios desde 1996, se casaron en 1998 y funcionaron como equipo desde entonces. Tagliaferro se desempeñó como diputado bonaerense, volvió al llano y ganó la intendencia de Morón. Durante los últimos 5 años en cargos, Vidal detentó cargos de alta exposición pública, como la Vicejefatura de Gobierno y, ahora, la Gobernación bonaerense.