En un breve discurso brindado en Ezeiza, durante una quema de droga, el Presidente volvió a referirse a la lucha contra el narcotráfico. Responsabilizó el legado dejado por la gestión anterior y llamó a la unión.

Mauricio Macri encabezó un procedimiento de quema 15 toneladas de droga en Ezeiza. El Presidente cuestionó con unas palabras al legado de la gestión del gobierno anterior al señalar que “miraron para otro lado”.

“Las organizaciones mafiosas se fortalecieron por la ausencia del Estado. Desde el primer día asumimos el compromiso de dar esta batalla y la verdad que la damos porque creemos que es fundamental para la libertad de cada uno de los argentinos”,  señaló.

Acompañado por Patricio Bullrich, la ministra de Justicia de la nación, Macri no se refirió durante sus 5 minutos de conferencia a la turbulenta semana económica que atravesó el Gobierno y puso el foco en eje contra “las organizaciones mafiosas”.

“No queremos más barrios dominados por bandas ni padres desesperados ni chicos perdiendo su futuro. Es una batalla con resultados que nos tienen que llenar de esperanzas”, enfatizó.

Y agregó: “Los argentinos somos capaces de hacer grandes cosas, lo que estamos haciendo vale la pena”.

El mandatario, en ese sentido, sostuvo que “retroceden las mafias y el delito” al tiempo que "avanza una sociedad sana, que es en la que queremos vivir”.

“Podemos trabajar la familia, las organizaciones, las instituciones religiosas, los líderes barriales para recuperar a nuestros jóvenes de las adicciones”, concluyó.