Gonzalo Sarasqueta es periodista y dirigente de la agrupación Ahora La Plata. En diálogo con Dos Líneas señaló la importancia de generar nuevos puentes de participación ciudadana y de superar la tradicional estructura de partidos políticos.

¿Cómo definirías a Ahora La Plata?

Es un espacio político amplio, plural y moderno, que quiere transformar la ciudad de La Plata. Cuando digo moderno, no me refiero solamente al tema comunicacional, sino de la ingeniería en la participación. Lo que busca Ahora La Plata es sintetizar diferentes identidades políticas, que van desde el peronismo, pasando por el radicalismo, hasta el socialismo, como también gente que no viene de la militancia política formal. En relación a la pluralidad hablamos de tener las puertas bien abiertas a la ciudadanía, para estar atentos a las demandas, sin caer en el internismo de los partidos tradicionales. Además, queremos dejar en claro que tenemos vocación de poder. Queremos llegar a las instituciones para transformar la realidad.

¿Tienen un referente político?

Margarita Stolbizer es nuestro referente. Creemos que es la conciencia de la política argentina y consideramos que ha dado una batalla de largo plazo, que es la de los valores. No se ha quedado en el cortoplacismo electoral y nos ha movido la estantería de los valores en ese sentido. Su legado es terminar con ese axioma que nos lastima tanto que es `roban pero hacen´.

Stolbizer tiene un partido, el GEN ¿Por qué armaron una estructura aparte?

Porque defendemos una propuesta moderna. En los tiempos que corren hay que dejar a un lado esas identidades cerradas y compactas que son los partidos políticos, y hay que ir a buscar consensos amplios, pero bajo un título, que en nuestro caso es la sensibilidad social. Hay que armar cosas amplias, pero que sean coherentes. La propuesta de Ahora La Plata es superadora a lo que son los partidos tradicionales.

Me señalaste antes que quieren ser una alternativa de poder y para ello, en nuestro sistema se necesita un partido.

No necesariamente, podemos formar un frente electoral.

¿Con quién les gustaría integrarlo?

Con el GEN, con el Partido Socialista, con el Frente Renovador, con el que tenemos muchas cosas en común, con Libres del Sur, y con todos aquellos que tengan como título la sensibilidad social.

¿La centroizquierda debería unirse con Massa? ¿Lo consideran en ese espacio?

Siempre hay que hacer un equilibrio entre las posibilidades que da la realidad y lo que es lo ideal. Con el Frente Renovador tenemos una agenda en común que trabaja las PYMES, los trabajadores, que aborda la realidad de todas las personas que están quedando en los márgenes con las políticas del PRO. Si analizamos la formación original del Frente Renovador, en donde estuvieron personajes como Othacehé, u otros barones del conurbano, con eso no estamos de acuerdo. Tampoco estamos de acuerdo con las políticas de Massa de combatir el narcotráfico con el ejército en las villas miserias, o su postura a favor de la ley de derribos. En esas cosas no estamos de acuerdo y vamos a dar el debate. Pero creemos que podemos construir un acuerdo con un programa en común.

¿Cómo ves la gestión de Garro?

Garro ni siquiera nos cumple con la promesa que nos dieron a nivel nacional y provincial, que era esto de ordenar el Estado, de administrarlo como una empresa, que con ello venía, supuestamente, lo que era la eficacia en contraposición al kirchnerismo. Creo que no llegó ni a eso, ni a ser la contracara del gobierno anterior. Me parece que es la no gestión de Julio Garro. No dio en la tecla en los procedimientos para ordenar el Estado, ni en la seguridad, en la iluminación, ni en los bacheos.

¿Y a nivel provincial?

Creo que Vidal sigue apostando a esa suerte que fue tener un rival como Aníbal Fernández, que fue el peor candidato que pudieron haber elegido. Sigue con esa lógica de construirse el mejor enemigo, en vez de dedicarse a gestionar. Por ejemplo con la policía bonaerense, continúa apuntando a una situación comunicacional de enfrentar a lo ficticio.

Se decía que el kirchnerismo se construía a partir de un enemigo ¿Crees que Vidal utiliza la misma metodología?

Con todo lo que le puedo criticar al kirchnerismo, creo que había un correlato entre lo discursivo y los hechos, mucho más fuerte que lo que hay en Vidal. En el caso de la Policía da una batalla, pero parece que el principal objetivo es comunicacional y no resolver lo fáctico.

Cristina dice levantar las banderas de la centroizquierda. ¿Se puede reivindicar ese discurso por fuera del kirchnerismo?

Si, y te lo voy a contestar retomando el tema de Margarita. Hay algo que también hay que entender y es que la corrupción también es ideológica, la corrupción tiende a la concentración. El kirchnerismo estuvo atravesado por la corrupción y por eso creo que no se pueden jactar de progresistas. Me parece algo muy fácil de superar el kirchnerismo en términos ideológicos progresistas, a través de nuevas formas comunicacionales.

¿En qué consiste la nueva forma comunicacional?

Es fundamental el tema 2.0, las redes sociales. Debemos entender que la comunicación no es algo lineal donde hay un emisor activo y un receptor pasivo. Hay que empezar a entender que la gente quiere participar, y en el caso de la política las redes sociales son el dispositivo ideal para eso. Eso no quita que no utilicemos los medios de comunicación tradicional y que no estemos en el territorio. Es importante retomar el papel activo de la cultura, con participación ciudadana. En ciudades como Medellín o Rio de Janeiro la gente participa, a través de las redes sociales, en temas culturales. Acá en un despacho se define lo que se va hacer el 19 de noviembre sin que nadie pueda opinar.

La das un valor trascendental a la cultura, decime un libro que te haya marcado.

Un libro que a mí me marcó mucho es la Resistencia de Ernesto Sabato. Ahí llama a que los jóvenes se metan, muestra que las personas no son un medio sino un fin. Sabato expone lo que es la cosificación, entender a las personas como objetos, llevarse puesto a los valores. Me parece que es un canto humanista de Sabato y la juventud debería tomarlo.