En esta jornada se cumplen 25 años del atentando a la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA). A las 9.53 de la mañana una bomba estalló en el edificio de la calle Pasteur 633, dejando un saldo de 85 muertos y 300 heridos.

El ataque fue organizado por Irán y perpetrado por el grupo terrorista Hezbollah. Tras este hecho, se abrió una causa judicial que a día de hoy tiene 300.000 fojas.

En el 2001 se inició el primer juicio oral por el atentado, llevado a cabo por el Tribunal Oral Federal 3 que, durante tres años, juzgó a 22 personas implicadas en el ataque terrorista.

Este Tribunal logró comprobar que hubo encubrimiento y corrupción judicial liderada por el entonces presidente de la Nación, Carlos Menem.

Además, estaban involucrados los servicios de inteligencia y miembros de la comunidad judía como Rubén Baraja, el juez a cargo de la causa, Juan José Galeano y los dos fiscales federales que actuaron: Eamon Mullen y José Barbaccia.

Los implicados fueron absueltos por diferentes irregularidades cometidas en su contra, mientras que los autores materiales del encubrimiento fueron puestos a consideración de la justicia federal.

En agosto de 2015 comenzó el segundo juicio por el atentado a la AMIA. Casi 4 años después, Galeano, Mullen, Barbaccia, Anzorreguy y Telleldín fueron condenados por encubrimiento y delitos conexos. Menem, Beraja y Palacios fueron absueltos.